lunes, 15 de julio de 2013

UNA MAMÁ CON BLOG



Siempre quise ser madre, no sabía en qué momento de mi vida, pero algo en mi me decía que no estaría completa si no lo descubría algún día. Y aunque lo quería, nunca me puse a pensar realmente en qué pasaría cuando ocurriera. Llegué a los 28 años y pasó, me embaracé. Estaba retrasada de mi periodo, eso no era raro ya otras veces había sucedido, sin embargo en esta ocasión un pequeño presentimiento me hizo comprar una prueba. Al instante de comprobar lo que ya presentía una ola de dudas y remordimientos me invadieron porque no cumplía con los requisitos que mi mente se había impuesto para conocer la maternidad: no estaba casada, no tenía una casa, no había terminado mi maestría, no, no, y entre más No acumulaba más me decía a mi misma precisamente eso: No, ahorita no.
Tras los No, vinieron los reproches para mí misma: por qué no me cuide si ni que fuera una niña de secundaria, por qué en ese momento que me acababan de promover en el trabajo. Luego... los qué dirán: qué va a decir mi nuevo jefe, qué dirán mis papás, mis amigas, la familia de mi novio.
¿Y mi novio?, bueno queridos lectores, mi novio estaba en un coma con los ojos abiertos, muy curioso, la decisión estaba en mi. Sabía que él me apoyaría pero en los últimos años no han metido la idea de que "es nuestro cuerpo y tenemos derecho sobre él", lo que no nos dijeron es que cuando albergamos a alguien más ya no se vale hacer lo que sea con "nuestro cuerpo". 
Entonces me dediqué a investigar qué podía hacer, los resultados fueron espeluznantes, los consejos de algunas amigas de mis amigas resultaron peor ya que hablaban de deshacerse se un hijo como expirmirse un barro, se lee cruel pero en la realidad es mucho peor. Alguien crecía dentro de mi y merecía todas las oportunidades del mundo. Así que me aventuré a vivir mi embarazo, a gozarlo, y aprender de él para transmitirlo a otras chavas primerizas.
Hoy a tres meses del nacimiento de mi chamaca me dispongo escribir sobre mi experiencia y encontrar en el camino algunas coincidencias con otras vidas y otros momentos.